04 agosto 2023

CON EL "A DE PLATA" EN EL BOLSILLO. 97- MotoGP, Dorna y DAZN: se acabó el escribir sobre el Campeonato del Mundo de Motociclismo de velocidad... espero que por ahora

Miré un día la fecha del carnet de conducir y me di cuenta que hace más -mucho más- de veinticinco años que aprobé el permiso importante, "el de moto", el A (en aquella época, A2). Así que me propuse dar un poco la brasa y contaros manías y anécdotas que me han ocurrido durante este tiempo. ¿Hasta cuando? No lo sé, según me vaya acordando (algo difícil con este cerebro cada día más reblandecido que tengo), según me vayan ocurriendo... o cuando digáis basta.

97- MotoGP, Dorna y DAZN: se acabó el escribir sobre el Campeonato del Mundo de Motociclismo de velocidad... espero que por ahora
Con mi llorado amigo Jose, en uno de los muchos fines de semana
a ver 'el Mundial'
Desde que, junto con otros amigos, Voro y yo iniciamos Voromv Moto en 2010, he escrito sobre MotoGP, mi pasión deportiva desde que era adolescente, sin saltarme ni una temporada. De hecho, mi primer artículo en el blog fue sobre unas ideas para alimentar la categoría reina. A partir de ahí siempre he hecho artículos sobre 'el Mundial', sobre todo de la categoría MotoGP, de sus prototipos, de sus pilotos, de sus trejemanejes internos. Horas de 'charla conmigo mismo' sobre el campeonato que me enganchó hace bastante más de cuarenta años, plasmadas en letras electrónicas, y siempre por el placer de hacerlo, siempre por el placer de opinar como simple aficionado.


Los grandes de RTVE Requena y Nieto ¡qué retransmisiones más buenas!
Lo triste es que llevo estos últimos años sin la misma ilusión de siempre. El que mi querido Campeonato del Mundo de Motociclismo de velocidad fuera cambiando a motores de cuatro tiempos por motivos más políticos que reales lo llevé bien. También el cambio del nombre del campeonato a 'MotoGP', con una categoría 'MotoGP' en ella. Lo que no me gustó fue el cambio de RTVE a Tele5, con ese novato y exagerado Nico Abad y la 'ventanita' para inflarnos a publicidad. Pero luego llegaría lo peor, el apagón: Movistar TV. De pronto se acabó el poder disfrutar de las carreras comiendo, o en el sofá, en el bar, en el motoclub, en la casa de veraneo, en la de tu vecino. Antes se veía el Mundial en la tele, cualquier tele, y la gente entendía de carreras, muchos, y hablaban de carreras, muchísimos. El lunes en el desayuno o almuerzo en el bar siempre habían conversaciones de motos. En el trabajo se hablaba de la carrera del domingo. Hablabas de carreras con cualquiera. Hasta entonces el Mundial de Motociclismo, luego MotoGP, era conocido.

Todo eso desapareció con Movistar TV, con MotoGP en cerrado a partir de 2014. Lo vaticinamos muchísimos: el campeonato iba a dejar de verse, y con ello el ser rentable para los pequeños equipos con sus pequeños pero importantísimos patrocinadores. Las revistas iban a desaparecer o reducirse a lo mínimo. Y lo peor, que el aficionado normal, no tú y yo que estamos leyendo esto y amamos el motociclismo de competición, sino el de ver deportes, cualquier deporte, en la tele... iban a desaparecer. Mi hija Ruth, mi Tuti, que en apenas dos años acertaba a los ganadores más que yo, dejó de seguir el Mundial porque no le apetecía buscarlo 'en pirata', pues yo (y miles ¿millones?) nos negamos a pagar por ver carreras además de pasar lineas telefónicas y fijas para ello. Comenzaba el declive.

Durante cinco años mi típico 'charlas con mi casco...' fue sustituido por este cartel al escribir sobre MotoGP
En aquellos años los pocos que seguimos las carreras (grabando las retransmisiones en diferido de Tele5 al principio, aprendiendo idiomas después) comenzamos una tendencia que, en mi caso, se ha establecido, fomentada por el oscurantismo y, también, por el deseo de Dorna: en MotoGP la categoría importante iba a ser esa, MotoGP. Moto3 sería el semillero del campeonato. Moto2 el paso intermedio de los más destacados... y el purgatorio de los que les faltó poco. Todos querían ir a MotoGP, sólo a MotoGP, el único sitio donde se conseguía la fama y sueldos altos, importante después de tener muchos pilotos que pagar para llegar. Así que, con tanta incomodidad para seguir las carreras, lo lógico era centrarse sólo en MotoGP. Hasta yo lo hice, dejando de escribir de las otras categorías y posteriormente de verlas. La mayor diferencia entre la Formula 1 automovilística y MotoGP siempre había sido su variedad mecánica en un único fin de semana, donde antiguamente todos los campeonatos eran importantes. Eso acabó con Dorna y las retransmisiones en cerrado.


En 2019 llegó la esperanza con un modelo intermedio, el que nos prometía DAZN, una empresa que debutaba en España al conseguir los derechos de MotoGP. Con ella, pagabas por ver las carreras, pero ya no tenías que contratar nada más. Como las plataformas de streaming que cada vez se estaban haciendo más importantes, siempre que tuviéramos un correo electrónico y un reproductor conectado a Internet (TV, tablet, ordenador, móvil...) podías verla. En cualquier sitio, en cualquier momento. Además, nos pusieron un precio bajo, 4'99 euros/mes, para atraer gente a su plataforma y los motoristas que todavía quedábamos con ganas de ver carreras nos tiramos a ello sin dudarlo: calidad cada vez mejor, cada vez más contenido y un precio razonable. Pero aunque muchos dejamos el oscurantismo y la piratería para abrazar el modelo, a DAZN al parecer no le acabaron de salir los números: miles, ¿millones? de espectadores se habían perdido por el camino.


Lo peor llegó al año siguiente, con el COVID 19. Yo empezaba a estar un poco cansado de escribir de un MotoGP que Dorna cada vez estaba bloqueando más a todo aquel que no fueran sus canales contratados. Cada vez nos llegaban más cartas de 'violación de derechos' y demás gaitas cuando simplemente comentábamos cosas a nivel aficionado, escribiendo un boca a boca que, creo, deberían fomentar para expandir el negocio. Pero la pandemia llevó a millones de personas a recluirse, y yo volví a aportar con la sana intención de fomentar la afición, por aplicar mi granito de arena a la lucha contra la reclusión. Y sin ganar nada, porque lo que aporta Blogger a Voromv Moto por visitas no da ni para pagar ese DAZN que contratábamos.

Y ahí viene otro de los clavos en el ataúd: DAZN. Nuestra 'gran esperanza' conseguía en 2022 los derechos de la Liga de Fútbol española y, con ello, los motoristas pasamos de ser los que iniciamos la marca en España a los que íbamos a pagar, nos gustara el balompié o no, los precios de sus derechos. Mi caso en concreto es ése: para mí DAZN es sólo motociclismo, el resto no me interesa. Pero tengo que pagarlo. Encima ayer supimos que nos subían la cuota, que repito empezó en 2019 con 4'99 euros/mes, de 19'90 a 29'90 euros/mes ¡un 50 % más en la misma temporada!. Arriba las manos, esto es un atraco... tenemos que pagar al fútbol.


Al final, en 2023 me encuentro cansado de escribir de MotoGP, un campeonato que Dorna no sabe, o no quiere saber cómo llevarlo: Ahora pongo sanciones arbitrarias, ahora las quito. Ahora prohíbo la evolución de las motos, ahora hago la vista gorda en aerodinámica y sistemas de regulación de altura. Ahora recorto tiempo de entrenamientos para Moto3 y Moto2, ahora los recorto más. Ahora me invento una carrera corta para el sábado, ahora cambio otra vez el número de entrenamientos libres y clasificatorios. Ahora pongo cada vez más carreras, ahora pongo un mes de parón que comprime todavía más el calendario y desconecta al aficionado. Ahora retiro material libre, ahora denuncio a periodistas no oficiales. Y DAZN, después de anunciar que iba a eliminar de raíz el pirateo de su señal ¡nos castiga con un sobreprecio excesivo a los que sí pagamos!.

30 euros son un depósito. Cientos de kms de curvas y más curvas.
Así que ¡a invertir el dinero en rodar con nuestras motos!
Así que basta. Se acabó, por ahora, el hacer más publicidad gratuita a Dorna y DAZN. Se acabó, por ahora, escribir sobre MotoGP. Quizás salga una novedad técnica que me inspire a contar. Quizás haya una gesta que me apetezca escribir. Pero mientras Dorna y DAZN nos sigan tratando así a los aficionados, no haré más comentarios de lo que, para ellos, es simplemente un negocio. Lo siento por los que me seguís, pocos pero seguro fieles, pero creo que entendéis mi estado de ánimo. Siento que se están cargando nuestro querido Campeonato del Mundo de Motociclismo de velocidad, o por lo menos me parece que lo están intentando. Y no seré yo el que cuente su necrológica. 

Una opinión personal de Miguel, aficionado al Campeonato del Mundo de Motociclismo de velocidad desde 1982.




4 comentarios:

Anónimo dijo...

Te entiendo perfectamente porque llevan muchos años poniendo a prueba nuestra paciencia y ultimamente, además, nuestro bolsillo.
Gracias por estos artículos durante tanto tiempo y espero -estoy casi seguro- de que volveremos a leerte sobre el Mundial.

amigo dijo...

Ya sabíamos que esto iba a ocurrir, se veía venir desde hace años.
Lo dijimos una y otra vez, que así la afición se iba a perder... y la afición se ha perdido.
Poco a poco, pero lo han conseguido.
Soy un "supermegahiperaficionado" de toda la vida, de todas las modalidades, cross, enduro, trial, resistencia, velocidad... y turismo y aventuras, pero las carreras hace tiempo que nos lo ponen cada vez más difícil y ya es imposible... ¡¡¡ 30 euros al mes !!! ¿están locos?
Todavía tengo en el trastero, bien apiladas, TODAS las revistas (solo moto, motociclismo y todas las que salieron después) desde 1978, donde salía Kenny Roberts tras proclamarse campeón del mundo de 500cc
Antes soñábamos con todo lo relacionado con las motos, ahora me basta con tener una motito y salir a pasear algún domingo.
En fin, esto es lo que ha traido la codicia y avaricia de unos pocos, que no les importa hundir este gran deporte a cambio de llevarse ellos personalmente una buena tajada económica.

Muchas gracias por haber estado aquí informándonos.
Seguiré atento, de todas formas, por si escribes algo nuevo.
Nos vemos, amigos.

Anónimo dijo...


Muy buenas,
he escrito aquí otras veces (no muchas), con cierto espíritu crítico en ocasiones... pero hoy toca mensaje de apoyo.
La mercantilización del deporte está acabando progresivamente con la afición pura, en favor del fanatismo irracional... lo único que importa es el dinero
Poco a poco, los aficionados se van desencantando y, sin abandonar esa pasión, porque no se puede, sí que se abandona el seguimiento... en favor de otros aspectos de la vida personal de cada uno.

Personalmente, ya fue un desastre cuando Dorna se izo con los derechos del campeonato de SBK... fue el paso previo: eliminar la competencia.
Desde hace un tiempo ya me viene gustando más las SBK que Moto GP... pero en las últimas temporadas se la están cargando también... de momento en lo deportivo.

En fin, que seguiremos apasionados por las motos, pero desde otras posturas.
Como aficionado y como persona tengo un límite... y a veces hay que decir basta... por principios, por integridad.

Saludos
fran

Anónimo dijo...

Pues sí. Toca nostalgia. Yo recuerdo bien las carreras en TVE de los domingos, qué emoción, las seguía todo el mundo, con ese gran Valentín Requena conduciendo las emisiones como otro piloto más. La fórmula era buena, había afición y el negocio funcionaba bien. Las veía mucha gente que nunca había cogido la moto. Vi los últimos años de Nieto, las victorias de Aspar, de Pons, el meteórico ascenso de Crivillé. Lamento que eso no se haya mantenido. Y, ciertamente, antes las reglas eran sencillas y claras. Manía de liar al aficionado. Lo que el dopping le hizo al ciclismo, le están haciendo a MotoGP los organizadores actuales.

Los 10 artículos mas leídos en el último mes.