Novedades 2019. Pursang E-Street: eléctrica con aroma street-tracker (datos, fotos y vídeo)

Si hay un nombre que triunfó en los sesenta y setenta fue el de Pursang, las motos de cross de Bultaco. El nombre venía de 1964, cuando la marca británica Metisse decidió sustituir los arcaicos motores de cuatro tiempos de sus compatriotas por los más competitivos de dos, llegando a un acuerdo con Bultaco. Éstos, con picardía, aceptaron, aprendieron... y sacaron su propia gama de cross: contra una "mestiza", Bultaco preparó una "pura sangre". 

Bien, después de más de treinta años del cierre definitivo de Bultaco, el nombre Pursang vuelve a lucir en una moto española. Y no es una Bultaco, ni de cross, ni de dos tiempos... ni siquiera de gasolina. Se trata del proyecto de Jim Palau-Ribes de crear Pursang Motorcycles, que se inició con una moto de cross con motor cuatro tiempos, 450cc, y aspecto retro-futurista. De ella derivó una moto de dirt-track que incluso ha llegado a participar en el Superprestigio. 


El nuevo proyecto es totalmente distinto: una moto eléctrica funcional, urbanita, que permita paseos por la montaña. Una mezcla entre futuro, scrambler, y street-tracker (motos de dirt-track adaptadas a la calle). Se trata de la Pursang E-Street:

Datos del prototipo todavía hay pocos. El chasis recibe la experiencia adquirida con las motos de cross y dirt-track, siendo un doble cuna con tubo de sección rectangular. Unas partes serán de aluminio y otras de acero. Las ruedas son ambas de 18", calzadas con neumáticos mixtos. Las suspensiones son actuales, con horquilla invertida y monoamortiguador trasero. Los frenos luce discos lobulados. La estética se basa en el dirt-track, con ese falso depósito alargado y ese guardabarros trasero largo y recto. El asiento estará a 820mm de altura. Se espera ofrecer dos versiones, una
convencional y otra llamada "Big Bore" con chasis completo de aluminio y fibra de carbono en la carrocería.

El motor eléctrico sin escobillas Ashwoods está limitado para poder conducir la moto motoristas A1 y B. La electrónica de control (incluido el panel de mando) y las baterías son de los especialistas Torrot (propietarios de GasGas, recuerdo). Estas baterías -dos- son extraibles de una forma curiosa: levantando el asiento. Desde allí se accede a ellas, por lo que se podrán cambiar por otras cargadas o subir a tu casa, donde enchufarlas con facilidad. Se habla de un tiempo de carga de dos horas (muy pocas me parecen) y una autonomía de 90kms en conducción rápida y unos 120kms en ciudad, aunque en breve se probará con baterías de mayor capacidad.

¿Un sueño? Sí, es posible... pero que como ves en el vídeo, ya rueda en estado de prototipo. Si quieres hacerte con una, contacta con ellos, están disponibles en pre-reserva. 

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