Las tres últimas vueltas de este Gran Premio pasaran a los anales de la historia de MotoGP, como uno de los mas electrizantes de todos los tiempos.
Valentino temía a Lorenzo por su claro potencial, y levantó un muro de separación entre ambos. Lorenzo sólido como una roca, no se dejó influir por las artimañas del gran campeón, e impuso su solidez mental, para "buscar" y pelear con Valentino de manera frontal, y con todo el descaro. Todo esto se vio reflejado en la pista...... hubieron mas duelos, pero este tenía algo especial. Lorenzo mostró sus credenciales a Rossi, y le mostró que estaba ahí para intentar vencerle, con sus mismas armas.
Dos caracteres fuertes, de líderes. Un aspirante que asistía al combate sin miedo a ser derrotado. Un montón de títulos, contra un montón de hambre de ellos.
En esta ocasión el maestro, le "robó" la cartera, en la última curva al descarado aspirante (su especialidad), pero después, no siempre fue así.....
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