Con las preparaciones Street Fighter, hay que tener mucho cuidado, por que es muy fácil que a uno se le vaya la mano, y acabar realizando auténticos engendros con combinaciones de colores imposibles, y aspectos demasiado estridentes.El movimiento Street Fighter nació con una sola finalidad, que era devolver a la vida, aquellas motos a las que los años se les echaron encima, y que aún siendo muy buenas, el mercado ya no quería. También sirve para recuperar esas motos no tan veteranas, en las que un reparar un "arrastroń", no compensa económicamente, al ser mas caras la piezas de recambio, que el propio valor de la moto.
Ahora mismo desconozco, que posibilidades éxito tendrían al pasar una ITV, pero si que hay soluciones para poder hacerlo.....
Hoy os traigo, el primer ejemplo, de una serie de tres, en el que se actualiza a una moto histórica, sin valor en el mercado. La Suzuki GSXR 1100 del 91, con sus extraordinarios motores SACS.
Es una moto realizable sin un desembolso económico demasiado grande, si deshechamos algunos de los componentes que obviamente se han sustituido por motivos de "exposición". Hay que recordar que muchas de estas motos transformadas se exponen en salones dedicados a las preparaciones.
La dos únicos elementos de mas difícil adaptación son: el escape y el subchasis con su colín. El primero si que requiere una labor artesanal difícil de realizar , y que precisaría ayuda externa. El segundo consiste en la adaptación del colín de una GSXR 1000, modificando el subchasis original, y recortando el tubo superior del mismo, uniéndolo con tornillos. La horquilla es original, anodizada de color azul.
El resto es mucho trabajo de pulido (fácil), y una pintura adecuada.
Lo que mas me gusta de esta serie de modelos transformados, es que han respetado su procedencia, no es nada cara su transformación, y que no se puede negar que es una Suzuki, por lo que sigue teniendo su alma intacta, aunque rejuvenecida.
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