Chasis deportivo, suspensiones Race-Tech, escape Yoshimura, frenos Hayes, profusión de carbono... y no, no es una RR ¡¡¡es una Custom!!!

No me canso de repetirlo, para mí una moto tiene que ser capaz de "bailar" entre curvas dando placer a su conductor. No digo deprisa... digo fluido, agradable, gozoso. Por eso me meto con algunos Scooters y, sobre todo, con algunas Custom que apenas sirven para ir recto hasta la siguiente terracita donde lucirla.

Bueno, pues ahora aparecen los norteamericanos -San Bernardino, California- de Big Bear Choppers a "reinventar la moto" con su modelo Titanium. Es curioso que una empresa dedicada a producir customs extremas (podéis ver su catálogo pinchando aquí) ahora lleguen hablando de chasis reforzados -derivado de uno de Erik Buell para las H-D FXR-, "poco" ángulo de dirección (29º), suspensiones de calidad (material Ölhins adaptado por Race-Tech), discos flotantes mordidos por

pinzas monobloque de cuatro pistones y anclaje radial Hayes, llantas de aluminio forjado RC (100/90x19" delante, 180/70x18" detrás con neumáticos Avon Cobra) y mucha, mucha fibra de carbono de serie (guardabarros delantero, tapas laterales, tapa del filtro de aire, carenados... todo ello realizado por Yoshimura). Eso sí, es curioso que no nombren en su catálogo qué peso tiene... seguro que no se acerca al de una Bimota...

El resto de componentes de la moto también son de calidad reconocida: el

motor es el conocido por aquí S&S V111 Carb Evolution con 116cv y 166Nm de par; la caja de cambios de seis velocidades es de Baker, con correa primaria Delkron; Yoshimura también firma la realización del escape con especificaciones BBC; los relojes son Nissin; los cables Goodridge... vamos, que se supone que la pagas cara, pero el material parece muy bueno. Por cierto, el precio comenzará en los 37.900$ del modelo None.

La moto se venderá en tres versiones: totalmente desnuda (None), con un pequeño cupolino (Sport) o con un carenado semi-integral (Touring). La verdad es que tiene pinta de ser una moto que cumplirá lo que prometen, una Custom con la que poder conducir kilómetros y kilómetros con comodidad y seguridad, sin temer el tipo de carretera por la que circules... ni a qué velocidad lo hagas. Garantizan que la moto será estable y segura a su tope de 240km/h... vale, lo que digan... me conformaría que se dejara llevar a cincuenta km/h menos... 



Por cierto, como soy ya algo mayor, la versión Sport no deja de recordarme la H-D XLCR que llevó Michael Douglas en Black Rain.

                 

Fuente: Big Bear Choppers

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