05 noviembre 2020

Música celestial. Indian Board Tracker 8V oficial. El sonido de las primeras carreras de la historia.


Esta es la sorprendente Indian 8v destinada a participar en las carreras sobre pista de madera, en el año 1915
Las pocas que se fabricaron, fueron reservadas para la Clase A, y para pilotos de fábrica, exclusivamente. Así pues, estamos hablando de un ejemplar realmente muy valioso.



Estas máquinas eran capaces de alcanzar entre 160 y 180 Kmh, en la mayoría de pistas de madera. Estamos hablando de unas velocidades alcanzadas con neumáticos que eran unos de bicicleta reforzados, y sin ningún tipo de suspensión

La moto tenia que ser arrancada por medio de interminables empujones, en los que había que calibrar bien, la entrada de gasolina, el avance la chispa, el acelerador....  Un montón de maniobras, todas ellas manuales, claro está. Fijaos en la empuñadura izquierda que controla el avance del encendido y el descompresor, ambas cosas a la vez.

La moto está equipada con la horquilla corta de carreras con triangulación de refuerzo, y el depósito es una versión mas larga del de serie.
Los pedales son libres en esta moto, ya que a los pilotos no se les permitía montar la cadena que enlazaba con el piñón de la rueda, por cuestiones de seguridad

No había embrague, se utilizaba una especie de amortiguador de transmisión, y en las salidas todos los pilotos partían empujados por alguien de su equipo.

Este modelo en concreto, es una unidad de 1915 que no ha sido restaurada, a la que solo se le ha hecho lo necesario para que el motor funcione. Todos sus componentes son de estricta serie
No se conoce la historia de esta unidad en concreto, aunque probablemente participó en las carreras australianas.

El vídeo es magnifico. Solo tenéis que observar los agujeros practicados en las culatas de 8 válvulas, que tienen por finalidad permitir la salida de gases sin quemar, por la falta de estanqueidad de las válvulas. No os perdáis tampoco las ventanas en la base de los cilindros, por donde se ven los pistones trabajando.

Una verdadera joya, de altísimo valor, Un verdadero privilegio verla funcionando.

En el vídeo de abajo, podéis revivir las sensaciones al pilotar una moto de esta época, en la 1/2 milla de Davenport. El sonido de fondo, al principio del vídeo, cuando están rodando en la pista, no tiene desperdicio, es aterrador.

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