Trans-Alcañiz 1987: El "Espíritu de la Aventura" no tiene por qué ser caro...
Sabed que me encanta el Trail, el circular por caminos de tierra por el puro placer de ver "donde va esta pista", o en otras ocasiones "a ver si soy capaz de pasar por ahí". Pero el problema es el de siempre: necesitas una buena moto y un buen equipamiento... y ni se te ocurra pensar en competir.
Vale, vale... ¿y éso tiene que ser así? Pues la verdad es que no. Todos nos tomaban por locos, pero la primera carrera de las Vespino Series que discurrimos Voro y yo hace años se basaba en esa premisa: ciclomotores económicos, ganas de conocer gente y mucha, mucha diversión.
Bien, pues imaginad una época anterior (concretamente treinta y siete años) en la que podías organizar una excursión cronometrada, e intenta que pueda participar cualquiera, con muy poco dinero, sin necesitar un equipamiento "de Gran Premio": una carrera de ciclomotores automáticos por pistas de montaña sin más preparación que quitarle algo de peso (algunos... otros no quitan ni las cestas portabultos). Y ahora imaginad que participa prácticamente todo el pueblo...
Sabed que me encanta el Trail, el circular por caminos de tierra por el puro placer de ver "donde va esta pista", o en otras ocasiones "a ver si soy capaz de pasar por ahí". Pero el problema es el de siempre: necesitas una buena moto y un buen equipamiento... y ni se te ocurra pensar en competir.
Vale, vale... ¿y éso tiene que ser así? Pues la verdad es que no. Todos nos tomaban por locos, pero la primera carrera de las Vespino Series que discurrimos Voro y yo hace años se basaba en esa premisa: ciclomotores económicos, ganas de conocer gente y mucha, mucha diversión.
Bien, pues imaginad una época anterior (concretamente treinta y siete años) en la que podías organizar una excursión cronometrada, e intenta que pueda participar cualquiera, con muy poco dinero, sin necesitar un equipamiento "de Gran Premio": una carrera de ciclomotores automáticos por pistas de montaña sin más preparación que quitarle algo de peso (algunos... otros no quitan ni las cestas portabultos). Y ahora imaginad que participa prácticamente todo el pueblo...
Todos mis envíos largos: LOS ESPECIALES DE MIGUELXR33
2 comentarios:
Qué maravilla!!! En mi pueblo, los amigos organizábamos triales con vespinos y mobilettes, aprovechando las "zonas" de las obras: montones de tierra, zanjas, tablones, etc. Y años después nos íbamos juntos de excursión con las puch y las derbi a pasar el día por los caminos
Yo también recuerdo recorrer los caminos de tierra del pueblo donde veraneaba con el Variant. Estudiaba en el Moto Verde cómo ponía Carlos Más la pierna en las cronometradas y yo intentaba imitarlo. ¡Cuántas caídas bien invertidas!
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