Todos nosotros hemos pasado por periodos de inactividad motera, cuando los hijos recién nacidos requieren toda nuestra atención. Vemos pasar una moto, y se nos van los ojos detrás..... Pues bien, Colin quiere acabar con este síndrome de abstinencia con uno de sus inventos.
Se trata de un coche de bebés motorizado con el que al mismo tiempo que paseamos al niño/a, también podemos dar rienda suelta a nuestras ansias velocistas.
Menos mal que todas las pruebas se han hecho con un muñeco bebé, y no entra en los planes de nadie, introducir en este artilugio un niño real. ¡¡¡Que locura!!!
1 comentario:
Bueno por ahora no somos inventores ni estamos preparados para hacer esas cosas, pero para lo que si estamos preparados es para tener hijos y llevarlos en nuestros coches, y la seguridad no se negocia.
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